Vacaciones de revista
Estoy deseando que lleguen mis vacaciones. El ritmo de trabajo actual que mantengo no me permite hacer casi nada que no sea estrictamente laboral. Y estoy agotada. Quiero irme a la playa y 'chiringuitear'. A todo esto, me viene a la mente una de las cosas que no entiendo de las vacaciones de la gente que va a desconectar a la costa. Y es que me da la impresión de que hay personas que interpretan descanso con ponerse las prendas más frikis de su armario. Bermudas imposibles, camisas hawaianas, mariconeras para hombres y, sobre todo, mujeres que se ponen durante todo el día los caftanes de colores que en estas fechas siempre regalan las revistas femeninas. Entiendo su uso para ir a la playita, pero, señora...¿también para ir a cenar? Añadirle pendientes no hace de ese caftán transparente un vestido de noche. Ni del pareo una prenda vintage glamourosa.
Por eso, apuesto por unas vacaciones con estilo, porque me apetece sentirme guapa incluso cuando no tengo que arreglarme para que me vean mis jefes. POrque en verano estamos impresionantes, tan morenos, y por qué arruinarlo por creer que descansar es dejar de vestirse para enfundarnos en trozos de tela.
Felices vacaciones a los que estén ya disfrutando, a mi aún me quedan 20 días para ello. Comienza la cuenta atrás.