Un vestido, 3 cuerpos

Sin palabras.

Por guapa me tengo...

Hay colores que inevitablemente uno asocia a un determinado lugar y época. A mi me pasa con el verde. Cuando lo veo me acuerdo del buen tiempo, de una terraza y de todo lo bueno que viene asociado con el sol y el calor. Es un color que casi exclusivamente uso en primavera, ¿Por qué? Cualquiera sabe que nos lleva a enlutarnos en invierno y lavarnos con lejía en verano. Pues asi me siento yo con el verde, inexplicablemente sólo lo uso con la llegada de los días de clima cálido. 'La que de verde seviste por guapa se tiene' Debe ser que sólo me tengo por guapa en esta época.
Es difícil de combinar, no favorece a todo el mundo y además es un color muy indiscreto, pero igualmente que viva el verde y todo lo que me hace evocar.

Combinaciones del verde:
- Rosa palo
- Blanco
- Negro
- Rojo
- Naranja
- Coral
- Lila
- Beige
- Cámel
- Albero
- Amarillo pálido
- Salmón
- Determinados azules

Qué se lleva verde esta temporada:
- Faldas folk
- Cinturones trenzados
- Bermudas
- Alpargatas
- Sandalias Ipanema (las de Giselle Bundchen)
- Blusas de gasa
- Camisetas customizadas con chapas y lazos de colores
- Collares y pendientes XXL

COCONIMO, COCONIMO

Ni Milán, ni París ni Nueva York. Si hay un lugar en el mundo donde la moda es el leit motiv, ese es Japón. Lo bueno:ellos captan las tendencias mucho antes que nadie, lo malo: se las ponen todas juntas de manera que no hay forma de saber qué prendas llevan. Pero eso sí, el lugareño que sabe vestir es increíble, porque marca tendencia y potencia el "copieteo".
No les importa el qué dirán, algo que mata la moda en ciudades pequeñas españolas, no les importa que les miren, algo impensable en sociedades elitistas y mironas que nos rodean y sobre todo no les importa que les fotografíen, algo que nos ayuda a entender su universo de moda.
Ojalá en ese sentido aprendiésemos de ellos y nos declarásemos en huelga de hacer caso a criticones compulsivos.

Updating....

En días como estos, en que la sociedad casi te exige que tengas un estilo propio, que no seas igual, que te distingas...es complicadísimo vestirse. Porque si te pones las combinaciones habituales, eres sosa, si te arriesgas con una nueva, eres 'fashion' y si te dejas llevar por la moda del momento, vas igual que el resto del mundo. En estos casos una se desespera y opta por pasar de todo. Modernizar la imagen pasando por alto esos tres puntos importantes no es tarea sencilla y sin embargo es posible. Basta con unos cuantos trucos para Actualizar esas prendas que nos 'miran' desamparadas desde el fondo del armario. Estoy convencida de que esa expresión tan manida de 'fondodearmario' no es más que eso, que las prendas poco a poco van pasando de usarlas mucho a no usarlas apenas. Resultado: Van directas a lo más profundo del mueble.

Ya sabes, resucitar una prenda es complicado, pero no imposible. Exige tres premisas básicas:
- Tiempo para probarse
- Espejo para mirarse
- Paciencia para pruebas erróneas

Así pues, Ctrl F5 al armario y actualización inmediata de aquello que creíamos perdido para siempre.

Esas opacas bolsas

Se que soy de naturaleza cotilla. Que cada vez que me encuentro a mi misma preguntando detalles y cosas que se supone no deberían interesarme me siento un poco 'portera'. Pero es que es inevitable, hay cosas que una necesita saber. Una de ellas y muy relevante es el tema de las bolsas. Cuando estoy un rato junto a alguien (suelen ser mujeres siempre mis objetos de atención) me intriga muchísimo saber qué llevan dentro de esas bolsas que llevan colgando. Pero no me interesa cualquier continente, me atraen los de cartón o los que llevan los logos de las tiendas. ¿Qué llevará? ¿Será algo que yo no he visto y necesito urgentemente? No lo puedo evitar, me intriga enormemente saber lo que otras han adquirido. Por eso me encantaría que las bolsas fuesen transparentes o ser poseedora del don de visión de Rayos X. Ya, ya sé que ni una cosa ni otra son políticamente correctas, pero que quieres, a veces hasta me duele el rabillo del ojo de escudriñar el interior de mis queridas y deseadas amigas bolsas del prójimo.

Como monos de imitación

Hace años mirábamos los desfiles soñando con poder algún día llevar a nuestro armario una de las codiciadísimas y carísimas prendas que proponen los diseñadores más 'In'. Ahora ya no nos limitamos a soñar, ya que simplemente el trabajo se reduce a una visita diaria a las cadenas textiles más famosas (Inditex, Induyco, Mango, Blanco, Corte Inglés, H&M...) y buscar. Una búsqueda con misión más que posible: encontrar ese clon, copia de los que se lucen tan bien sobre la pasarela.
No hay más que fijarse que cada cierto tiempo las perchas se ríen de las grandes marcas portando copias baratas de lo que casi nadie puede permitirse. Total, la conclusión es bipolar: ¿Nos están ayudando a hacer realidad nuestros sueños o nos quieren ver a todos como monos de imitación?

Traspasando fronteras

He llegado a la conclusión observando la manera de vestir de algunas personas, que la frontera que separa lo moderno de lo excesivo es minúscula. También hay quien cree que vestir casual es rremangarse la falda y bajarse el escote, o ponerse zapatillas de deporte y una camiseta vieja. Las etiquetas de la moda actuales dignifican el 'todo vale', pero, sinceramente, hay cosas que deberían estar prohíbidas.

La esclavitud quedó abolida

En los probadores de las tiendas uno aunque no quiera, oye conversaciones. Y he descubierto con tristeza que últimamente (supongo que debido a la inminente Operación Bikini) todas versan en torno a los kilos de más. Que si me sobra de culo, que si mira qué michelines en la tripa...La verdad es que en los probadores uno se da cuenta de que nadie está contento con su cuerpo; Menos mal que siempre está la amiga del alma para ser justa con el veredicto: 'No exageres, mujer, yo te veo bien, tienes el cuerpo bien proporcionado. Pero si quieres te traigo otra talla...'. En fin, que mientras escucho estas cosas me doy cuenta de la esclavitud a la que nos sometemos absurdamente. Porque cada vez son más famosas que muestran orgullosas sus curvas, sus formas de mujer. Y nos gustan, nos parecen espectaculares, pero no son nuestro modelo a seguir. Por mucho que nos vendan que la delgadez ya no está de moda, para muchas eso no significa nada. Su modelo de mujer es irreal. Y para evitar esa irrealidad, se necesita una nueva liberación de las pesadas cadenas de tópicos que arrastramos las mujeres. La moda es diversión, no un instrumento para hacernos mártires en los probadores.

Zapatones

Llevo un tiempo fijándome en algo curioso. Cuando las revistas hacen reportajes a famosas alejadas del mundo de la moda, les hacen unos estilismos estupendos. Pero hay un detalle que me llama la atención, y es que los zapatos, siempre les quedan grandes. Hace poco descubrí el por qué: los diseñadores sólo se 'desprenden' de los artículos de mayor tallaje, porque son los que más les cuesta vender en las tiendas. Con las modelos no hay problema, todas miden 1'75 y tienen un 41 de pie..pero claro, ¿qué hacen con una famosa que calze una 36? Pues ponerle lo que tienen y tratar de que el Photoshop lo arregle un poco y tu vista no se fije en sus pies.

Nuevo partido

Urge la necesidad de una nueva alternativa. Debe nacer cuanto antes un nuevo partido: el de SACARSE PARTIDO. Porque hay quien todavía cree que existe eso que llaman cuerpo perfecto, cánon de la belleza. No son más que tonterías, porque si te pones a comparar los cuerpos famosos que se consideran perfectos, te da la risa: Giselle Bundchen y Jennifer López. ¿Qué tienen en común? Desde luego no su estructura corporal. Sin duda alguna sí su manera de sacar partido a sus formas.
Y si no, haz la prueba por la calle, verás niñas bajitas con un estilazo de morirse y chicas altas que lucen la ropa. Cuerpos rotundos con clase y delgados que saben sacarse partido. Al final, es lo de siempre, hay que saber qué ponerse, cómo ponérsela y sobre todo ACTITUD. LO que se conoce como lucir la ropa. Qué más da que seas como seas, si te compras algo es porque te gusta y te favorece. Por qué someterse a estrictas medidas. Dejemos el Canon para Pachebel.